A menudo los aficionados al motor vintage reflexionamos sobre la falta de épica, gestas heroicas y emoción en las competiciones actuales, pero a cambio debemos celebrar que no se produzcan tan a menudo situaciones escalofriantes como la que muestra la imagen.
Mauro Bianchi perdió el control en las Forest Esses de Lasarthe en 1968.
Su precioso y azulado Alpine A-220 quedó rápidamente reducido a negras cenizas.
Mauro sobrevivió aquel infierno de llamas y humo, aunque vemos en la imagen sus guantes casi fundidos con la piel de sus manos, el traje de Alpine-Renault hecho jirones, su mono ignifugo interior a la vista en brazo y abdomen.
Aunque para mi, lo mas impactante es su casco y su balaclava totalmente calzinados.
Mauro salvó aquel día la vida pero lamentablemente por contra su hermano Lucien en 1969 y recientemente su nieto Jules en 2015 no tuvieron tanta suerte.
Esta es la parte "chunga" de la competición, pero ahora no creo que dejasen publicar este tipo de fotos y por eso no acabamos de enterarnos de lo que pasa a veces realmente. Si bien las medidas de seguridad de hoy en día no tienen nada que ver con las que existían en tiempos de Bianchi.
ResponderEliminarTuvo mucha suerte, lo que no sé es si le quedaron secuelas graves. Y qué mala suerte lo de sus familiares corredores.
Bueno, un saludo y bienvenido a la realidad pos-vacacional!
Una familia con gasolina en las venas, su hermano Lucien falleció en las 24 hrs de Le Mans al año siguiente y a raíz de ambos accidentes Mauro se retiró de la competición, pero su nieto Jules fue la ultima victima mortal de la F1 en Japón en el 2014 .
EliminarGracias Antonio y bien hallado!
El automovilismo es cruel, es triste mirar esas fotos.
ResponderEliminarEl blanco y negro le añade un toque dantesco.
EliminarEl piloto parece estar todavía en estado de shock, examinándose las heridas.
Un abrazo!
Feliz cumpleaños amigo mío, espero que haya sido un hermoso día, con tu gente y paseando!
ResponderEliminarSi bien las medidas de seguridad son incomparables entre una época y otra, es difícil trazar una línea que asegure espectáculo con seguridad. Ahí tenemos las críticas a la F1 actual respecto a la suspensión de carreras en cuanto cae lluvia medianamente abundante. ¿Primamos el espectáculo, o la seguridad?.
ResponderEliminarPor cierto, feliz cumpleaños, aunque sea con retraso (soy como un piloto doblado, jejeje)
Para mi siempre debe primar siempre la seguridad de los pilotos y es indudable el paso adelante en este sentido durante este siglo, aunque es indudable que la lluvia iguala a todos los monoplazas y favorece el espectáculo en la pista.
EliminarGracias colega!