Si bien tengo una máxima en esta sección, y es la de no repetir modelos de caja, en este caso haremos una excepción por lo inusual del avistamiento.
A finales de la década de los ochenta, los coches propulsados por gasóleo antecesores de los turbo diésel de intercooler e inyección directa eran más bien escasos en ventas en nuestro país, y estaban reservados a taxistas o comerciales que debían recorrer grandes kilometrajes anuales soportando lentas aceleraciones, graves vibraciones en el interior, un sonido casi de tractor y el irritante olor a gasóleo al repostar.
Esa es la rareza y el encanto actual de este 324d de BMW de 1989. La cotizada carrocería del E30 ofrecía motores de 6 cilindros en línea, (para muchos fanáticos de la marca los más buscados), eran los 320i, los 323i, 325i aparte lógicamente del primer M3.
Pero en este caso se trata de todo un seis en línea bávaro, pero de tan solo 86 cv, y su velocidad máxima era de 165 Km/h.
Sus aceleraciones también eran discretas como por ejemplo su 0 a 60 Km/h en 6,2 segs y eran necesarios gastar 15,5 segs para ver llegar la aguja del velocímetro hasta los 100 km/h.
Pero donde BMW echó el resto fue en refinar el funcionamiento de su propulsor para evitar reducir las vibraciones y el nivel de ruido interior. El 324d ofrecía cuatro plazas, un buen equilibrio entre espacio para las plazas traseras y su baúl de equipajes, esto hizo que se vendiera relativamente bien entre los taxistas germanos, hasta entonces fervientes partidarios de los Mercedes-Benz.
Lógicamente su fuerte era el consumo, bajando de los 9 litros en ciudad y bajando por poco de los 7 litros circulando cómodamente a 120 Km/h.
Su precio de base era de 27.450 marcos alemanes a los que se había de sumar 2.825 marcos más para contar con aire acondicionado y además como es tradición en la marca a base de incrementar la factura se podían añadir extras, como las preciosas llantas de 14 pulgadas montadas en esta unidad.
La llegada del 324TD, propulsor con turbo heredado de la Serie 5 supuso el fin de su vida comercial. Ofrecía ya 115 cvs y 190 Km/h, por contra los primeros 324td se mostraron más frágiles con problemas en sus turbos y sus culatas.
El exotismo de esta versión son sus cuatro puertas y poder presumir de ser la versión menos potente de la historia de la producción de la Serie 3, aunque tratándose de un clásico eso no debe acomplejar a su propietario quien lamentablemente parece haber desterrado la d de diésel de su capot trasero.