Algunos clanes poderosos como los Kennedy han sufrido gran numero de desgracias en su familia que hacían pensar en una oscura venganza del destino o en un costoso peaje por su éxito económico y social.
Otro ejemplo de como la mala suerte puede diezmar, en forma de trágicos accidentes una prestigiosa familia, se ha dado en los Michelín. Este mal fario ha actuado a todos los niveles pero principalmente sobre los herederos y directores de la dinastía familiar.
Las desdichas las inicia Etienne Michelin hijo del co-fundador Edouard. Etienne era un gran aficionado a la aviación, de hecho parecía importarle más que la co-dirección de la fábrica de neumáticos. Su último y fatal vuelo lo inició el 27 de Agosto de 1932 desde Clermont-Ferrand con destino a Puys, donde nunca llegaría, pues atrapado en una fuerte tormenta choca contra la montaña Puy de Dome.
Otro ejemplo de como la mala suerte puede diezmar, en forma de trágicos accidentes una prestigiosa familia, se ha dado en los Michelín. Este mal fario ha actuado a todos los niveles pero principalmente sobre los herederos y directores de la dinastía familiar.
Las desdichas las inicia Etienne Michelin hijo del co-fundador Edouard. Etienne era un gran aficionado a la aviación, de hecho parecía importarle más que la co-dirección de la fábrica de neumáticos. Su último y fatal vuelo lo inició el 27 de Agosto de 1932 desde Clermont-Ferrand con destino a Puys, donde nunca llegaría, pues atrapado en una fuerte tormenta choca contra la montaña Puy de Dome.
Parecido destino siguió su hermano, el otro heredero del imperio del caucho, Pierre Michelín, muere al volante de su Citroën Traction Avant además de otras tres personas involucradas en el accidente, un 29 de Diciembre de 1937, en Mormant sur Vernison en la N7.
Contaba en el momento de su desaparición con 34 años, ¡ justo como su hermano Etienne !.
Contaba en el momento de su desaparición con 34 años, ¡ justo como su hermano Etienne !.
Por aquel entonces Pierre alternaba la dirección tanto de la fábrica de neumáticos como de la Citroën, al declararse esta en quiebra, los Michelín uno de sus principales acreedores, se hicieron cargo de la marca del Doble Chevron.
Tras el trágico deceso, aunque no era de la familia, Pierre-Jules Boulanger es nombrado presidente de Citroën y co-administrador de Michelín. El creador del mítico 2cv comenzó a trabajar en 1918 con los de Bibendum, ganándose rápidamente la confianza del capo Edouard.
Su brillante carrera cesó cuando Boulanger estrelló mortalmente su Citroen Traction Avant 15 contra un árbol, el 11 de Noviembre de 1950 camino de Clermont-Ferrand a París.
Pocos meses después su hermano Daniel, arquitecto de profesión aplastó a su hija Sylvie, maniobrando con su propio auto.
Otro asuntó turbio y alimento de la leyenda negra de los Michelin fue el accidente de caza en el cual Patrice Michelín, oveja negra de la familia y nieto del fundador de la empresa, mató a su esposa Nicole Bardi.
Patrice nunca pisó la fábrica, limitándose a ejercer el papel de rico heredero, de hecho se le expulsó del negocio familiar a cambio de una generosa asignación y vivió aislado en un palacete junto a sus tres hijos y su también adinerada consorte.
La versión oficial fue un lamentable accidente de caza por el cual a Patrice se le disparó accidentalmente el arma, hiriendo de muerte a su mujer en la nuca. Naturalmente ríos de tinta corrieron en Francia, al tratarse del clan Michelín. Su enorme prestigio y poderío económico influyó en el veredicto de los tribunales, a pesar de que su tesis de que el arma se cayó al suelo disparándose sola, no coincidía para nada con el ángulo del orificio de entrada plenamente horizontal que presentaba la víctima. En realidad los peritos dictaminaron que Patrice había sostenido el arma y apretado el gatillo de la escopeta de forma totalmente voluntaria.
Pero el veredicto fue homicidio involuntario y el precio de su libertad fueron 2.000 francos, una cifra ridícula para las arcas de los Michelín.
El culebrón siguió todavía más allá; con anterioridad a la muerte de Nicole Michelin, según la demanda de paternidad de Jean Phillip Rouchon, Patrice tuvo relaciones con su madre Annick Rouchon una invidente suiza que conoció al magnate cuando contaba 22 años y era estudiante de medicina.
Su relación extra-conyugal pudo haber sido el desencadenante del suceso, y según Rouchon su madre contaba con cartas manuscritas del propio Patrice Michelín en las que este en un supuesto ataque de remordimiento, se declaraba autor voluntario de los hechos y se justificaba diciendo que su difunta esposa "era muy mala con él y le humillaba incluso ante los niños y los amigos".
Oficialmente Michelín nunca reconoció a su hijo ilegitimo.
Pero el mal fario como hemos visto se centraba especialmente en los herederos ya fuera por tierra, aire, ¡o incluso mar. Claro ejemplo de ello se vivió en 2006 con el naufragio de Edouard, hijo de François y a la sazón patrón de la marca.
Su brillante carrera cesó cuando Boulanger estrelló mortalmente su Citroen Traction Avant 15 contra un árbol, el 11 de Noviembre de 1950 camino de Clermont-Ferrand a París.
La Segunda Guerra Mundial que diezmó tantas familias tampoco dejo bien parados a los Michelín. Jean Pierre Michelin, nieto de André, héroe de la resistencia y piloto de las Fuerzas Aéreas Francesas cayó en combate en Córcega en 1943.
MARCEL MICHELIN |
Su padre Marcel, fundador de la Asociacion Deportiva Michelín y declarado miembro de la resistencia, finalmente fue capturado y deportado por los nazis pereciendo en el campo de concentración de Buchenwald en 1945.
La fatídica N7 iba a hacer otro terrible estrago en el clan Michelín. Jean-Luc Michelin nieto de André Michelín, se mató el 20 de Enero de 1949 a la temprana edad de 29 años, con sus dos hijas Annie de 2 años y Roseleyne de 1 año, al incrustarse su Bugatti 57 contra un camión. Un tercer ocupante del vehículo falleció también, mientras su esposa tan solo quedó levemente herida.
TUMBA DE JEAN LUC MICHELIN E HIJAS |
Otro asuntó turbio y alimento de la leyenda negra de los Michelin fue el accidente de caza en el cual Patrice Michelín, oveja negra de la familia y nieto del fundador de la empresa, mató a su esposa Nicole Bardi.
Patrice nunca pisó la fábrica, limitándose a ejercer el papel de rico heredero, de hecho se le expulsó del negocio familiar a cambio de una generosa asignación y vivió aislado en un palacete junto a sus tres hijos y su también adinerada consorte.
La versión oficial fue un lamentable accidente de caza por el cual a Patrice se le disparó accidentalmente el arma, hiriendo de muerte a su mujer en la nuca. Naturalmente ríos de tinta corrieron en Francia, al tratarse del clan Michelín. Su enorme prestigio y poderío económico influyó en el veredicto de los tribunales, a pesar de que su tesis de que el arma se cayó al suelo disparándose sola, no coincidía para nada con el ángulo del orificio de entrada plenamente horizontal que presentaba la víctima. En realidad los peritos dictaminaron que Patrice había sostenido el arma y apretado el gatillo de la escopeta de forma totalmente voluntaria.
Pero el veredicto fue homicidio involuntario y el precio de su libertad fueron 2.000 francos, una cifra ridícula para las arcas de los Michelín.
El culebrón siguió todavía más allá; con anterioridad a la muerte de Nicole Michelin, según la demanda de paternidad de Jean Phillip Rouchon, Patrice tuvo relaciones con su madre Annick Rouchon una invidente suiza que conoció al magnate cuando contaba 22 años y era estudiante de medicina.
Su relación extra-conyugal pudo haber sido el desencadenante del suceso, y según Rouchon su madre contaba con cartas manuscritas del propio Patrice Michelín en las que este en un supuesto ataque de remordimiento, se declaraba autor voluntario de los hechos y se justificaba diciendo que su difunta esposa "era muy mala con él y le humillaba incluso ante los niños y los amigos".
Oficialmente Michelín nunca reconoció a su hijo ilegitimo.
Pero el mal fario como hemos visto se centraba especialmente en los herederos ya fuera por tierra, aire, ¡o incluso mar. Claro ejemplo de ello se vivió en 2006 con el naufragio de Edouard, hijo de François y a la sazón patrón de la marca.
Edouard salió de pesca junto a un experimentado pescador, en su barco Liberté. Fue encontrado sin vida cerca de la Isla de Sein en el noroeste de Francia. Las autoridades marítimas no explicaron el naufragio pues el mar estaba en calma, y solamente había una ligera niebla.
Edouard era un hombre sencillo, de trato fácil, trabajador y con plena dedicación a la compañía, al estilo de los fundadores. Especialmente apreciado por su impulso deportivo a la marca, la cual bajo su mandato cosechó triunfos tanto en rallyes, F1, motoclismo...
De momento este ha sido el ultimo mazazo a los de Clermont-Ferrand. Ciertamente como reza el famoso titulo de la telenovela mexicana; Los Ricos También Lloran.