jueves, 3 de febrero de 2011

ENTRADA Nº 50 Y GILLES VILLENEUVE.


Un lejano 21 de mayo del año pasado comenzó la andadura de este Blog, con una entrada donde exponía mi  punto de vista crítico sobre el panorama actual de la F1. El pasado Septiembre con el post sobre Pininfarina y Ferrari  (por cierto el post más visitado por vosotros) llegaba a las 25 entradas, si entonces ya me hacían mucha ilusión,  las 50 de hoy que os voy a contar. Este blog nació para que un ignorante como yo pudiera adquirir un poco de cultura automovilística. Pero subsiste gracias a vosotros amigos, seguidores y lectores.  Me parece increíble  las más de 29 mil páginas vistas a día hoy, (para mi que los chicos de Blogger se han equivocado al contar, jeje). Solo daros las gracias otra vez y deciros que estáis en vuestra casa,  así que no os cortéis a la hora de hacer comentarios, proponer temas o lo que sea. Pero en fin vamos al tajo, el objetivo de este blog ahora es alcanzar las 100 entradas. Para celebrar esta ocasión especial me reservaba un personaje especial (no es Ayrton Senna, este lo dejo para otra ocasión)...
Hay pilotos que se convertido en grandes gracias a su gran numero de triunfos o de títulos mundiales. Sin embargo ha habido otros,  tanto del mundo de los rallys como de la F1, que sin ganar el título de la máxima categoría, han pasado a  la historia del automovilismo como figuras legendarias y serán siempre recordadas por los buenos aficionados. Sus trágicas desapariciones los convierten en ídolos y hacen que aun sean recordados con mayor cariño. Uno de esos casos que se me ocurren fue Henry Toivonen de quien ya escribí algo en una anterior entrada http://zona-rapida.blogspot.com/2010_06_01_archive.html. Otro de ellos, sería Gilles Villeneuve. Más allá de las frías estadísticas, fue el campeón en aspectos tan poco valorados por los números como: el corazón, la espectacularidad, la valentía, el arrojo, la determinación o el carisma. 


Lugar y fecha de nacimiento.
Berthierville, Quebec, Canada, el 18 de Enero de 1950.
Escuderias F1
McLaren (1977),  Ferrari,(1977 hasta 1982)
Victorias en F1
6 victorias: Canadá(1978), Sudáfrica(1979), EE.UU, GP del Oeste(1979), EE.UU(1979), Mónaco(1981), España(1981)
Palmares
Campeón Formula Atlantic(1976), Campeon Formula Atlantic Canada-USA(1977), Subcampeon del mundial de F1 en (1979), 68 carreras en F1,  13 podios, 2 poles position,  8 vueltas rápidas en carrera.

Ante la falta de recursos para correr en monoplazas, dedicó todo el dinero que ganaba trabajando en la construcción para correr en Trineos de nieve a motor. Esta competición le daría una sensibilidad especial sobre superficies deslizantes. A la temprana edad de 19 años gana el título mundial. Gran amante de todo lo que se moviera a gran velocidad, durante toda su vida Gilles tuvo una facilidad innata para pilotar los más diversos artefactos como motos, helicópteros o lanchas motoras. Después se inscribe en la escuela de pilotos de Jim Russell en Mont-Tremblant. De orígenes humildes y sin apoyo financiero se vio obligado a vender su casa y vivir en una casa rodante. Un amigo suyo John Lane le compró los dos coches con los que compitió en la Formula Ford. Así con el apoyo de varios benefactores privados conseguiría ganar los títulos de la Fomula Ford y la Formula Atlántic.
Su paso por la F1 se inició en McLaren. El mismo James Hunt tras disputar el Molson Grand Prix,  aconsejó su fichaje a Teddy Meyer el jefe del Marlboro Team: " acabo de ser derrotado por ese tal Villeneuve. Es realmente extraordinario. Debe darle trabajo".  Por fortuna hicieron caso de las sabias palabras del "Golden Boy". A pesar de que solo disputó para McLaren el GP de Gran Bretaña, ocupando una discreta undécima posición. Al terminar la temporada Mclaren  decidió no renovarlo y Villeneuve  volvió a su casa, cuando recibió una llamada de un tipo con acento extranjero. La llamada provenía de Italia y le ofrecían realizar una jornada de Test en Modena. No,  no era ninguna broma, cuando Enzo Ferrari vio por primera vez al piloto canadiense, le recordó al legendario Nuvolari. El mismo Enzo afirmaba que además de coches le gustaba "construir" pilotos y en Gilles vio un diamante en bruto a pulir. Esa misma temporada ficharía por la Scuderia que ya nunca abandonaría. Corrió los dos últimos Gp de la temporada.

Curiosamente su bautizo con Ferrari fue en casa, en el circuito de Mosport en Canadá. Ya desde las primeras vueltas exhibió un pilotaje al límite que le costó un trompo y un posterior abandono. Peor suerte sufrió en el siguiente GP, en Japón, al intentar superar a Ronnie Petterrson, su rueda delantera contactó con las traseras del famoso Tyrrell de 6 ruedas y el Ferrari voló. Gilles resultó ileso,  no así dos espectadores que murieron y 10 más que resultaron accidentados. Ronnie tras la carrera declaró "este tipo es un peligro público". Sin embargo no  fue  culpa suya sino de la organización que no advirtieron al público mal colocado.
En 1978 la racha de accidentes y retiradas prosigue. En Long Beach demuestra su carácter impulsivo pero Clay Regazzoni no lo era menos y el Ferrari del astro canadiense vuelve a salir catapultado por los aires. En las primeras carreras no lograba poner a punto su monoplaza para hacerlo competitivo. Pero nunca fue discutido por el Commendatore que apreciaba el carácter temerario de Villeneuve. Gilles con un 4º puesto en Bélgica, un 3º en Austria,  le dió la razón al terco patrón italiano. Su mayor experiencia y el trabajo duro de los componentes del equipo se tradujeron en su primera victoria,  en su casa, delante de su afición, de sus padres y de su joven esposa.
1979 se convertiría en su mejor temporada. Gracias a las victorias de Sudáfrica y las dos disputadas en Estados Unidos,  los tiffossi le encumbraron como a su nuevo ídolo. Obtuvo también 4 segundas posiciones (Francia, Austria, Italia y Canadá). Paradojicamente en su mejor temporada fue su propio compañero de equipo el Sudafricano Jody Schekter, apodado "el oso" quien  le birló el triunfo en el mundial de pilotos. Al  final tan solo les separaron 4 puntos de diferencia (51 a 47). Sin embargo hoy en día Gilles es recordado como mucho mejor piloto que Jody, pero quizá no fue lo suficientemente conservador, sobre todo con su mecánica,  para ganar aquel mundial.
En el Gp de Canadá el combativo Gilles solo pudo ser superado por Alan Jones a pesar de correr con el alerón trasero doblado. En el GP de Holanda, Gilles demostró que era inasequible a los problemas mecánicos y tras sufrir un reventón en su neumático trasero realizó sin problemas la vuelta entera al circuito para cambiarlo, por desgracia la suspensión quedo dañada y hubo de abandonar.
Otra actuación que nos dejo para la posteridad, tuvo lugar en Dijon. La carrera fue ganado por Renault. Fue el primer motor turbo en ganar una prueba en la F1 moderna. Los Renault aquel día volaban sobre el trazado francés, solo Gilles pudo intercalarse entre Jean Pierre Jabouille y Rene Arnoux,  a base de puro pilotaje.  La increíble serie de adelantamientos de Gilles acabó eclipsando por completo el triunfo de Renault. Aunque ya lo hayáis visto... merece la pena verlo repetido. Mas tarde Arnoux declaró: "si, me ganó, pero no me preocupa en absoluto. Supe que había sido superado por el mejor piloto del mundo".




Ante los que le acusaban de ser un piloto demasiado impulsivo, Gilles dió otra demostración de madurez en el GP de Monza. Delante de un público exultante por la triunfal campaña de la marca del Cavallino, Gilles supo ser un fiel escudero de Jody Scheckter manteniéndose tras su estela para garantizar matemáticamente el título mundial de pilotos del Sudafricano. Ya sin cortapisas, ganó la ultima prueba de la temporada disputada en el circuito Norteamericano de Watkins Glenn, y lo hizo  demostrando una insultante superioridad sobre suelo mojado. En los entrenos del viernes rodó 11 segundos por vuelta más rápido que cualquier otro piloto. Al ser preguntado por los periodistas,  Jaques Laffitee sonrió y respondió"  ¿ por que molestarse? , Gilles es diferente al resto de nosotros. El está en un nivel aparte". 
Gilles marchó de Canadá y eligió Montecarlo como su residencia Europea. Cuando no corría sentía un vacio que le llevaba  a desplazarse al lago Commo, para practicar motonautica o  volar con helicópteros. Sus múltiples compromisos y su prematura muerte le privaron de obtener el título oficial de piloto  de aviación civil. De hecho, una vez participó en una curiosa prueba de aceleración entre su Ferrari y un caza de aviación militar. Nunca estuvo muy lejos de su esposa e hijos. También era un gran aficionado a los esquís, pasando sus vacaciones en Sestrieres. Incluso llegó a participar en alguna prueba de aficionados.


Pero volviendo al mundo de la F1, 1980 fue un año para olvidar. Esa temporada solo pudo ser decimocuarto del campeonato con 6 puntos. Sus mejores resultados fueron 2 quintos puestos en Mónaco y Canadá. El monoplaza rojo de ese año, el 312T5 nunca acabó de ir bien y además la competencia se puso las pilas.  Gilles supo aguantar. Ferrarista hasta la médula una vez declaró: "si me hubieran dado tres deseos, mi primero sería correr en competición, mi segundo, estar en la F1 y mi tercero correr para Ferrari".
Su recompensa llegaría en 1981. Concretamente en el GP de Mónaco. Gilles dió toda una lección de pilotaje y siendo fiel a su estilo agresivo,  no era raro verle salir cruzado de algunas curvas.


Esa misma temporada en el circuito madrileño del Jarama protagonizó otra de sus actuaciones que han pasado a la historia. Después de una gran salida casi por fuera de la pista se situó tercero, Tras superar a Reuteman y finalmente a Alan Jones, se situó en cabeza. Pero luego tuvo que resistir los embates de un tren de perseguidores formado,  además de los antes citados,  por Laffite, Watson y De Angelis, para lograr la victoria. Pero a partir de ese triunfo, fiel a su estilo; capaz de lo mejor y lo peor, encadenó una serie de abandonos y accidentes que le alejaron otra vez del título mundial. Tan solo pudo obtener un tercer puesto en el circuito Canadiense.

En 1982 Ferrari fichó a Didier Pironi, en teoría como segundo piloto. Las relaciones entre los dos pilotos eran muy buenas. Las cosas no empezaron demasiado bien para el canadiense, tras dos retiradas en Sudafrica y Brasil, acaba tercero en Long Beach pero finalmente es descalificado por una irregularidad en la mariposa del turbo.
La ira de Gilles se desataría en Imola. Su cara de cabreo  en el podio lo decía todo. Mientras Pironi aun celebraba el podio, el canadiense visiblemente contrariado abandonó las celebraciones. Gilles en teoría primer piloto del equipo ostentaba una cómoda primera posición pero Didier Pironi estableció una fratricida batalla entre los dos Ferrari. Didier ganó la carrera por delante suyo y Gilles se sintió traicionado por su amigo y por su equipo. Gilles a pesar de ser muy impulsivo siempre respetó a Jody Schekter su ex-compañero cuando este optaba a la victoria. Por esa razón le sentó tan mal los ataques de Pironi en Imola.
En el Gp de Bélgica en el circuito de Zolder se desencadenó la tragedia. Paradojas de la competición se había calificado como muy peligroso al trazado de Spa-Francorchamps. El hecho luctuoso sucedió en los entrenos. Gilles buscaba una vuelta rápida mientras el monoplaza de Mass iba muy lento. Se encontraron al salir de una curva rápida. De nuevo haciendo honor al apelativo de "Aviador de la F1", el monoplaza nº27 salio catapultado por los aires, al igual que Villeneuve quien al parecer no portaba el dispositivo del cinturón de seguridad. Fue evacuado con vida del circuito solo un dia despues,  debido a la gravedad de las lesiones le fue retirado el apoyo vital. Se criticó duramente al monoplaza 126C2 pues poco mas tarde sufrió Pironi otro accidente que le costo serias heridas en las piernas.
Pero la estrella de Gilles Villeneuve nunca dejaría de brillar. Ni en el corazón de sus seguidores ni en el firmamento. Ya que unos aficionados suyos, venecianos,  le pusieron su nombre, en las vísperas del GP de Monza de 1981, a un astro situado en la Constelación de Perseo , con certificado incluido el Registro del Cielo de París.
Pero esa no fue la única estrella Villeneuve. La vida, como una especie de recompensa otorgó a su hijo Jacques  los títulos que se le negaron al progenitor. El nombre de Jacques siempre ha estado muy ligado a la familia  pues su tío que portaba el mismo nombre también fue piloto de competición.
El pequeño Villeneuve tras ganar las 500 millas de Indianapolis y el titulo americano de la categoría, triunfó también en la F1, ganando el campeonato en 1997. En total sumó buenos números como lo demuestran sus 11 victorias, 23 podios y 13 poles. Aunque sus cifras fueran mejores,  nunca llegó a tener tuvo el carisma de su padre.


sus citas celebres
  • Mientras mi coche funcione, me gusta ir al límite del principio al fin.
  • Antes del fin de mi carrera voy a ser capaz de inscribir mi nombre en el título mundial, pero si eso no es así, no importa, corro porque me gusta.
  • Sobre la muerte " yo nunca pienso en eso, sería una tontería. Cuando la muerte se decide a venir, no hay nada que puedas hacer. El mio es un trabajo peligroso, pero cual no lo es hoy en día.
  • Mi forma de conducir es al límite, cuando lidero la carrera y ruedo un par de segundos más lento porque voy líder, me aburro.
  • Amo y respeto a mis fans porque las carreras existen gracias a ellos. Esta es la razón porque siempre hay que dar lo mejor de si mismo. Debemos ofrecer a nuestro público un verdadero espectáculo.
  • Si todo parece bajo control, es que no vas lo suficientemente  rápido.


    lo que dijeron de el quienes le conocieron:
    • Es un poco extraño,  pero sin duda es un fenómeno. (Nelson Piquet)
    • Si esta carrera la hubiera realizado Jim Clark, todos ustedes estarían exultantes. Aplaudan por lo menos a Villeneuve (Mauro Forghieri, jefe de equipo de Ferrari, tras una remontada de último a tercero)
    • Creo que por fin Ferrari tiene un gran piloto (Enzo F. tras la victoria de Dijon)
    • Él era el diablo mas loco que jamás encontré en la F1, (Niki Lauda tras ser arrollado por Gilles en Imola)
    • Esto es típico de Gilles. Nunca se da por vencido (Alan Jones, tras vencer un épico duelo con el monoplaza de Gilles corriendo con el alerón doblado)
    • El no corría por puntos, corría para vencer. Pequeño de estatura pero era un gigante en la pista.(J.M.Fangio)
    • Nunca vamos a olvidarle, estamos hablando de una herida que nunca sanará por completo. Nadie puede llenar el vació que dejó (Patrrick Tambay)
    • No conozco a ningún ser humano capaz de hacer milagros. Pero Gilles podía sorprendernos a veces (Jacques Laffitte)

    3 comentarios:

    1. Hoy he disfrutado de dos grandes espectáculos: la presentación del Mp4-26 y la lectura de tu post: espectacular.
      He aprendido un montón, y me ha emocionado, desde sus difíciles inicios hasta su trágico fin.
      Esa frase de "Debemos ofrecer a nuestro publico un verdadero espectáculo", ya se la podían apuntar hoy quienes sólo buscan fama y poder.
      Gracias por el esfuerzo de compartir tanto con nosotr@s; ah, y felicidades por las primeras 50.

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    2. Gracias a Jose Luis,(pulgitaatodogas),acabo de descubrir tu blog,me gustaria felicitarte por la entrada.

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    3. Bienvenido a bordo, Jaume. Yo hacia tiempo que seguía tu blog, aprovecho la ocasión para felicitarte por el. Nos leemos.

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    Gracias por tu comentario.
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