Tantas cosas han cambiado durante los últimos 40 años en el mundo del automóvil que sería labor titánica enumerarlas todas, pero sí existe una revista que desde entonces permanece fiel a su cita mensual en los kioskos. Es por ello que desde este humilde blog les quiero rendir un pequeño homenaje.
Mi experiencia con AUTOMOVIL-FORMULA se remonta a principios de los años 90, cuando en una visita a casa de un primo mayor, comencé a ojear un reportaje sensacional sobre un Porsche 964 RS azulón.
Inmediatamente quedé seducido por la calidad de sus artículos y de sus fotografias, recordemos aquellos eran unos años pre-internet y los aficionados al motor no teníamos acceso a las novedades y pruebas ahora, a tan solo un golpe de click y encima podemos rastrear toda la basta red mundial. Por ello en muchos casos la cita mensual con el kiosko era ineludible para poder admirar aquellas maravillas rodantes.
En mi caso recuerdo que todavía era estudiante y no podía permitirme adquirir los ejemplares de modo que debía acudir a la biblioteca pública donde disfrutaba a ratos de la lectura de AUTOMOVIL, os confieso que eran descansos de mis tareas estudiantiles más prolongados de lo que debiera, (y así me ha ido en la vida), pero en todo caso gracias a ello me jacto de haberme culturizado un poquillo en el tema de los automóviles y esta revista contribuyó a forjar esta pasión.
Con mi primer salario, recuerdo en 1993, ya pude suscribirme y recibir mensualmente en mi casa los números, y esto constituía todo un acontecimiento. La devoraba en poco tiempo, a pesar de contar con numerosas y variadas secciones; test a fondo, comparativos entre autos rivales, información sobre los GP de F1 y rallyes, novedades de los salones internacionales, minimanía, audiomóvil etc, en ocasiones muchos de aquellos artículos los releía y volvía a disfrutarlos de tanto en tanto.
Para completar la colección acudía los domingos a los rastros de libros y revistas viejas donde me hice con un buen puñado de números, en busca de números míticos como la carrera entre Madrid-Barcelona disputada en carretera abierta entre un Porsche 928 y una moto, (hoy motivo de secuestro de la revista por parte de las autoridades) o el 2Cv circulando en una playa a vela, aunque desgraciadamente nunca tope con ellos.
Los tiempos cambian y mis gustos también, pues ya por el año 2004 deje de suscribirme a esta publicación, en parte porque ya disponía de conexión a Internet y en parte mis gustos sobre coches derivaron hacia los coches clásicos, pero debo reconocer que de vez en cuando cae en mis manos un ejemplar, y debido a su calidad a ratos me hace reconciliarme con el panorama actual del automovilismo.
En España siempre hemos tenido la suerte de contar con muy buena prensa del motor, contando con revistas que en gran parte han seguido hasta hoy día. Yo leo desde el número 1 la revista Autofácil, fiel compañera de mis ratos de cargas y descargas y de noches solitarias en las áreas de varios paises antes de que llegase Internet al móvil (qué diantres, todavía la sigo leyendo en el camión...). Pero también he leido de joven la Motor 16 (que me gustaba bastante) o la Autopista. Lástima que todo lo que tenía ha ido a parar al cubo de la basura en sucesivas mudanzas...
ResponderEliminarAsí pues, me sumo al homenaje de tu Blog y que cumpla otros cuarenta años más, por lo menos.
Saludos!
Otra de las razones para pasarse a la prensa digital es sin duda el ahorro de espacio físico, podemos acceder a todo a través de un móvil o tablet, pero al igual que los libros digitales para mi no tienen el mismo atractivo y la sensación que el papel.
EliminarEs cierto que hubo una época dorada de publicaciones de todo tipo, yo recuerdo comprar de cine, música, baloncesto, etc...hoy en día con la competencia feroz de la red, creo que para que una publicación escrita sea rentable y no caiga tiene que estar muy especializada para un publico fiel y tener mucha calidad en sus contenidos cosas difíciles a veces de obtener via web.
Abrazos!
Recuerco muy bien esta revista, yo tambièn la coleccionè durante muchos años, de hecho tuve màs de la mitad de los nùmeros fotografiados en el blog.
ResponderEliminarMi tema favorito era el de los autos de escala aunque fueran sòlo un par de hojas.
Las regalè hace unos años por un tema de espacio en mi casa, sòlo me quedè con un par de nùmeros que me interesaban especialmente.
Vaya sorpresa!, pensaba que solamente se comercializaba en España, imaginaba que el mercado del automóvil argentino era diferente al nuestro y entonces comercializar el mismo numero en varios países no era factible.
EliminarMi sección favorita era la de competición, en F1 escribió artículos Francesc Roses y en Rallyes Martin Holmes, eran tiempos anteriores al boom protagonizados por pilotos patrios como Sainz o Alonso y también difíciles para encontrar información seria sobre temas Racing.
Yo conservo todos los ejemplares, en cajetines anuales no ocupan tanto, aunque mitad está en mi trastero y otra parte en mi antigua habitación en casa de mi padre.
para tu decepciòn te comento que no se comercializaba en forma regular ni en todos los kioskos,
Eliminarla recibìamos en diferido, por lo que creo que mandaban para acà lo que sobraba de allà.
una làstima porque la informaciòn era muy completa.
Ah claro!.
EliminarUna buena oportunidad de comercialización habría sido dedicar una parte de la revista a vuestro mercado, competiciones,etc.. pero imagino que ya existía competencia argentina y no debía ser viable, una pena.
Un saludo.
Gran revista,
ResponderEliminarTengo en casa algunas de las que has enseñado, esperaba que saliera cada mes para cómprala.
Ciao.
Ya eramos dos, Jordi.
EliminarCreo que su éxito era que conjugaba un poco de todo, técnica, superautos, autos deportivos, competición y novedades.
Mas allá de las opiniones de otros probadores y revistas algo difusas, siempre confié en sus test por su rigurosidad, sus números y mediciones obtenidas en circuito de pruebas.
AUTOMOVIL dixit.
Si hay algo que lamento mucho ha sido no haber guardado esas revistas que tuve en mi infancia. Recuerdo que con 10 años me tuvieron que operar de una rodilla y una prima de mi madre me regaló dos bolsas llenas de revistas que tenía su marido. Gracias a ellas mi semana de reposo absoluto se me pasó volando.
ResponderEliminarPosteriormente, a lo largo de los años siempre han ido cayendo números, pero siempre pasaba igual, cuando tenía una buena colección acababa por regalarlas o sencillamente tirarlas, más que nada por problemas de espacio. Y ahora digo ¡nunca más! A parte de algún número esporádico que me llame la atención, tengo la revista EVO desde el primer número al actual, y no pienso parar, tanto que mi mujer ya sabe que si se mete por medio con las revistas salgo yo, jejeje.
Y por último, dar la enhorabuena a Automóvil por estos 40 años dentro de un sector en lo que no es fácil sobrevivir. Por cierto, 275 ptas un número de 1987 y 400 ptas en 1994...
Saludos ;)
PD: Ya me gustaría pillar el número que habla del FIAT Punto GT
Yo todavía cuento con la inmensa fortuna de alojar gran parte de mis libros, revistas, videos, consolas, videojuegos en casa de mis padres, cuando vuelvo ocasionalmente a casa de mis padres todavía hojeo algún ejemplar de AUTOMOVIL.
ResponderEliminarActualmente de hacer alguna colección me decantaría por Motor Clásico, revista también de gran calidad, pero ahora soy mas selectivo y la hojeo de arriba abajo antes de adquirirla.
También últimamente me ha dado por la TURINI y la 9ONCE.
Pues las revistas van por 5 o 6€, o sea mas de 800 "pelas" el doble que en 1994.
Creo que vendían números atrasados bajo pedido, prueba en su web a ver si tienes suerte.
Mi hermano era asiduo de esta revista, un buen tocho conserva en casa, desde casi principio de los 90. Gracias a él, le eché buenos vistazos a esta revista.
ResponderEliminarSaludos!!
al parecer todos tenemos un familiar que nos ha metido el gusanillo del motor dentro.
Eliminarabrazos!!